Toay
y sus poetas
La Leyenda del Caldén
(huitrú)
(Por
Alicia V. Villapol de Cardoso - Icha)
En
una pacífica tribu ranquelina mapuche, de las tantas
que habitaban LA PAMPA vivía Huitrú, un peñí que
correteaba como todos, por esta mapu que le pertenecía.
Era hostil y rebelde y, aunque pequeño, se daba
cuenta de las penurias, sufrimientos y persecuciones
de las que eran objeto.
Fue creciendo. Se convirtió en un joven fuerte y
valeroso, con un solo ideal defender a su raza de
las opresiones. Por esta causa fue perseguido y
hostigado por sus caiñé.
Un día, al resistirse al saqueo de la toldería,
fue capturado y mostrado como trofeo por sus adversarios,
llevándolo lejos del lugar.
Esa misma noche, amparándose en la oscuridad reinante,
logró escapar para buscar ayuda en otras tribus
cercanas.
Cuando sus caiñé notaron que el indómito y bravo
joven se había fugado, comenzaron a perseguirlo.
En su huida, Huitrú no se dio cuenta que se internaba
cada vez más en el corazón del monte pampeano. En
un momento se encontró enredado en unos bajos y
enmarañados arbustos, y por más que luchó no pudo
desligarse de sus ataduras.
Estaba sediento. Su cuerpo sangraba por las heridas
que habían provocado las ramas y las relín. Su mollfun
iba filtrándose en el suelo y atándolo cada vez
mas.
Al verse perdido se encomendó a su Dios, guitu wuta
chao, para que amparara a su raza a costa de su
propia vida y, por un designio de éste, se lo vio
de pronto convertido en un árbol frondoso, destinado
a brindar alimento y sombra a sus peñi y a los animales,
que serian los encargados de multiplicarlo por toda
La Pampa.
Al amanecer, cuando sus hermanos y sus adversarios
aún lo buscaban, sólo hallaron un imponente árbol
en medio de estas extensas llanuras. El huitrú tenía
las ramas cubiertas de relín, para defenderse de
quienes lo quisieran cortar, y su mollfun se había
convertido en una larga raíz buscando agua para
saciar su sed, en lo más profundo de la mapu y poder
aferrarse al hué que lo vio nacer. En el tronco
se notaban las heridas sangrantes que el mapuche
se hizo al huir.
Así como Huitrú (caldén) arraigado a este suelo,
su raza sigue luchando por los derechos en estas
tierras, afirmándose con fuerza y valor. Por eso,
cuando se destruye un caldén, se mata un antepasado.
GLOSARIO
Peñí: Hermano
Nollfun: Sangre. ICHA 8-8-98
Mapu: Tierra. Alicia B.Villapol de Cardoso
Huitrú: Caldén. Maestra integradora- Esc.N0 205
Caiñé: Enemigo TOAY- ( L P.)
Hué: Lugar.
Relín: Espina
Mapuche: Gente de la tierra.
Colahoró en la realización del Glosario, la señora
Ermelinda Dip de Gómez, descendiente de ranquel
mapuche.
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